Cristo Maestro, tú eres eI camino,
vida verdadera y eterna verdad.
Para el hombre sediento de verdades
y hundido en un mar de ideologías,
para el hombre que busca
la luz sin sombra alguna,
tú eres camino, verdad y vida.
Para el hombre que avanza desolado
de espaldas al amor que Dios nos brinda,
para el hombre que vaga
perdido y solitario,
tú eres camino, verdad y vida.
Para el hombre que vive sin fronteras
y cifra en el progreso su alegría,
para el hombre que sueña
tal vez con no morirse,
tú eres camino, verdad y vida.