2018-09-21

2018-09-21

De ningún don de Dios se da tanto despilfarro como de la mente, que es el don más precioso: ¡cuántos pastos envenenados, particularmente hoy, por lecturas, radio, cine, televisión! ¡Cuántos pensamientos contrarios a la fe y a la virtud! ¡Para cuántos la mente está inerme, y vagabundea por las cosas más raras! (ACV, p. 81).